Chuck Todd de NBC dijo que fue un suceso muy "extraño" que los hispanos recibieran al expresidente en el restaurante Versailles" en Miami, ignorando completamente el creciente apoyo de esta comunidad a Trump. Al mismo tiempo, calificó a los hispanos como "perversos" por aceptar la visita.
El presentador de NBC, Chuck Todd, se horrorizó al ver a los seguidores hispanos saludando al presidente Trump en un restaurante de Miami después de que salió de la sala del tribunal el martes, declarando que su apoyo era una "perversión".
Trump fue aclamado con entusiasmo por simpatizantes y líderes religiosos en el famoso restaurante cubano Versailles en Miami después de que se declarara inocente de 37 cargos de delitos graves por supuesto mal manejo de documentos clasificados en un tribunal federal. Trump se detuvo brevemente en el café donde compró comida y donde los seguidores rezaron por él y cantaron "Feliz cumpleaños" antes de su cumpleaños el miércoles.
Durante la cobertura en vivo de NBC News el martes, Todd se mostró horrorizado ante la escena "surrealista" de multitudes reunidas afuera del café en Little Havana.
"Mi palabra. Quiero decir que nunca antes habíamos visto algo así en los Estados Unidos", exclamó Todd. Comparó la recepción en la parada técnica de Trump con figuras políticas "corruptas" en países de América Central y del Sur que son celebradas por sus seguidores mientras están "bajo amenazas legales".
“Es una verdadera perversión de lo que solía luchar la comunidad en el exilio. Quiero decir, esto es lo que hace que sea tan surrealista verlo aquí en los EE. UU. Éramos el refugio seguro para aquellos que escapaban de momentos como este”, agregó.
El periodista creía que el "momento extraño" tardaría "años en comprenderlo".
En CNN, otro presentador de toda la vida se enojó al ver a Trump celebrando con sus seguidores.
El presentador Jake Tapper reprendió a su cadena por mostrar a Trump convirtiendo su reciente audiencia en la corte en un "espectáculo".
"La gente en la sala de control, no necesito ver más de eso. Está tratando de convertir esto en un espectáculo, un anuncio de campaña. Ya es suficiente", se quejó Tapper a los productores del programa.
Más tarde esa noche, CNN y MSNBC se negaron a transmitir el discurso del expresidente a sus seguidores.
