Por: Christine Dolan

En una revelación asombrosa y alucinante entre el exfuncionario de la CIA Michael Morell y John Brennan, el ex Director de la CIA durante la presidencia de Barack Obama ha incendiado Washington con un nivel de evidencia de espías que no se había visto en décadas en suelo nacional.

No es que esto no haya sucedido antes, sino que Morrell lo ha admitido y la hemorragia dentro de la Administración Biden es voluminosa.

La pregunta que surge es si habrá alguna rendición de cuentas o Estados Unidos continuará en espiral hacia una República Bananera del Tercer Mundo bajo el liderazgo de Joe Biden.

Morell admitió que estaba organizando una carta de expertos en inteligencia en octubre de 2020 después de que se revelara la historia del New York Post sobre la infame computadora portátil sexualmente inducida por drogas de Hunter Biden con su intención de respaldar que la computadora portátil Hunter Biden era una operación influenciada por Rusia.

Morrell declaró en 2020 que quería darle a la campaña presidencial de Joe Biden un "punto de conversación para hacer retroceder" a Donald Trump durante el último debate presidencial de 2020, según documentos informados por "Just the News".

Esta admisión prueba la carta firmada por Brennan y los otros 50 exfuncionarios de inteligencia que afirman que la carta de la historia de la computadora portátil de Hunter Biden plantea serias dudas de que su apoyo para firmar tuvo motivaciones políticas.

 Sirve como prueba de apoyo a la explosiva revelación del presidente del Comité Judicial de la Cámara de Representantes, Jim Jordan, la semana pasada de que la infame carta de inteligencia fue un esfuerzo político de los espías estadounidenses para servir a una campaña presidencial nacional.

Morell testificó ante el comité de Jordan que su conversación con Antony Blinken, entonces un asesor de la campaña de Biden para 2020 que había estado cerca de Biden durante años, quien ahora es el Secretario de Estado de los EE. UU., fue "desencadenada" por el esfuerzo de Morell para que otros funcionarios de inteligencia firmaran el carta y obtener cobertura para la candidatura de Joe Biden en los últimos días de su elección de 2020.

La carta firmada por 51 exagentes de inteligencia fue distribuida a medios de comunicación de todo el mundo para denunciar la validez de la computadora portátil de Hunter Biden.

Más tarde, el New York Times y otros Legacy Media admitieron que la computadora portátil de Hunter era válida. No fue desinformación impulsada por Rusia.

El correo electrónico también revela algunos de los otros expertos a los que Morell contactó para firmar la carta.

Incluyen:

-Ex Director de la CIA Leon Panetta;

-Ex Jefe de Seguridad Nacional Jeh Johnson;

-La actual Fiscal General Adjunta Lisa Monaco;

-El ex Director de la Agencia de Seguridad Nacional, Mike Rogers.

-El Ex Director de la CIA Leon Panetta firmó la carta.

El exjefe de la estación de la CIA en Moscú, Daniel Hoffman, reveló recientemente que se le acercó y se negó a firmar la carta.

"Tratar de darle a la campaña, particularmente durante el debate del jueves, un tema de conversación para hacer retroceder a Trump sobre este tema", escribió Morell a Brennan.

Desde entonces, Blinken ha tratado de minimizar su papel en la carta, insistiendo en que no fue idea suya.

Pero Blinked no ha negado su conversación con Morell ni el envío de un correo electrónico posterior al exjefe de la CIA, Brennan, que contenía un artículo de USA Today que proporcionaba el pasaje clave de la carta que afirmaba que la computadora portátil era una posible desinformación rusa.

El FBI tenía la computadora portátil desde diciembre de 2019, cuando la recuperaron del dueño de una tienda de computadoras de Delaware.

No había ni entonces ni ahora ni una onza de inteligencia estadounidense que probara que la computadora portátil era una operación de desinformación rusa.