El sheriff del condado de Bernalillo, John Allen, califica de "inconstitucional" la orden de salud pública de 30 días de la gobernadora de Nuevo México, Michelle Luján Grisham, que prohíbe la emisión de permisos para armas de fuego.
La gobernadora demócrata de Nuevo México, Michelle Luján Grisham, se enfrenta a un rechazo generalizado de las autoridades estatales tras su intento de prohibir los permisos de portación ocultos y visibles.
El sheriff del condado de Bernalillo, John Allen, describió la "orden de salud pública" de 30 días de Grisham como "inconstitucional" durante una conferencia de prensa esta semana a pesar de estar junto a la gobernadora durante su implementación de la política.
"Es inconstitucional, por lo que no hay manera de que podamos hacer cumplir esa orden", dijo el sheriff en una conferencia de prensa el lunes. "Esta prohibición no hace nada para frenar la violencia armada".
"Siempre debemos recordar que no sólo estamos protegiendo la Segunda Enmienda, sino que, al mismo tiempo, tenemos mucha violencia dentro de nuestra comunidad. Permítanme ser claro, mantengo mis estándares altos y no me protejo ni lo haré nunca. lo que es correcto."
Grisham emitió una orden de emergencia el viernes suspendiendo el derecho a portar armas en público en Albuquerque y los alrededores del condado de Bernalillo durante al menos 30 días luego de recientes casos de violencia armada.
La gobernadora dijo que espera que la orden enfrente desafíos legales, pero cree que necesitaba actuar en respuesta a muertes recientes relacionadas con armas de fuego, como la de un niño de 11 años que fue asesinado a tiros afuera de un estadio de béisbol de ligas menores a principios de este año.
La suspensión fue clasificada como una orden de emergencia de salud pública y se aplica al porte abierto y oculto en la mayoría de los lugares públicos, excluyendo a la policía y a los guardias de seguridad autorizados. La restricción está relacionada con un umbral para las tasas de delitos violentos que sólo se alcanza en el área de Albuquerque.
Allen afirma que presionó contra la orden de salud pública, diciendo que "[Grisham] sabía que nosotros, como agentes del orden, no estábamos de acuerdo con la orden y, como resultado, esta fue únicamente su decisión".
"No necesito un sermón sobre constitucionalidad por parte del sheriff Allen: lo que necesito es acción", dijo Grisham en una declaración en respuesta a Allen. "Lo que necesitamos es que los líderes defiendan a las víctimas de delitos violentos. Necesitamos que las fuerzas del orden, los fiscales de distrito, los funcionarios públicos, los líderes escolares y las agencias estatales utilicen todas las herramientas a su disposición para detener esta violencia. Punto."
Ella continuó: "Le hemos dado las herramientas, Sheriff Allen; ahora deje de ser escrupuloso al usarlas. No dejaré de hacer lo correcto y siempre pondré la seguridad de la gente de Nuevo México en primer lugar".
Los infractores podrían enfrentar sanciones civiles y una multa de hasta 5.000 dólares, según la portavoz del gobernador, Caroline Sweeney. La gobernadora dijo que la policía estatal es responsable de hacer cumplir la orden, pero reconoció que no todos los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley, incluido el fiscal de distrito del área de Albuquerque, están de acuerdo con ella.
Lujan Grisham citó varios tiroteos recientes en Albuquerque al emitir la orden, incluido el tiroteo del miércoles afuera del campo de Albuquerque Isotopes que dejó a Froyland Villegas, de 11 años, muerto y a una mujer gravemente herida. Los dos estaban dentro de un vehículo que fue rociado a balazos cuando la gente salía del juego.
El 13 de agosto, Galilea Samaniego, de 5 años, fue asesinada a tiros mientras dormía cuando cuatro adolescentes entraron a una comunidad de casas móviles en dos vehículos robados y abrieron fuego contra la casa. La niña recibió un disparo en la cabeza y murió a causa de las heridas en un hospital.
Otro tiroteo mortal tuvo lugar en agosto en el condado de Taos cuando un niño de 14 años usó el arma de su padre para disparar y matar a su amiga, Amber Archuleta, de 13 años, mientras estaban en la casa del niño.
