Según documentos clasificados filtrados por el aviador Jack Teixeira, la inteligencia militar de Ucrania, conocida como HUR, estaba planeando grandes ataques dentro del territorio ruso en febrero, pero retrasó los ataques debido a la presión de los EE. UU.
Según un informe filtrado de la Agencia de Seguridad Nacional, el alto funcionario de HUR, el mayor general Kyrylo Budanov, le dijo a un oficial “que se preparara para las huelgas masivas del 24 de febrero… con todo lo que tenía HUR”. La fecha original del ataque fue el primer aniversario de la invasión rusa de Ucrania.
Estados Unidos ha estado espiando a los funcionarios ucranianos durante la guerra y se dio cuenta de las intenciones de Budanov. Un informe de la CIA fechado el 22 de febrero indicó que la HUR había “acordado, a pedido de Washington, posponer las huelgas”. No estaba claro qué medios usó Estados Unidos para presionar a Zelensky para que retrasara las operaciones.
Si bien Ucrania ha llevado a cabo pequeños ataques con aviones no tripulados y otras formas de sabotaje dentro del territorio ruso durante la guerra, se desconoce qué quiso decir Budanov con "ataques masivos", según Zerohedge. Según los informes, un plan implicaba el uso de TNT para atacar la ciudad portuaria de Novorossiysk en el Mar Negro.
Los documentos filtrados indican que Estados Unidos presionó a Kiev para posponer las operaciones por temor a que Rusia respondiera con una escalada. Sin embargo, también hay indicios de que Washington ha ayudado a Ucrania a realizar otros ataques dentro de Rusia.
Fuentes militares de la OTAN revelaron que los drones ucranianos habían utilizado datos de GPS satelitales de EE. UU. para atacar objetivos en aeródromos en las profundidades del territorio ruso en diciembre. El gobierno de Biden refutó los comentarios de la OTAN e insistió en que Estados Unidos no “fomentó ni permitió” los ataques con drones.
Otros documentos filtrados revelaron que Zelensky tiene la intención de usar armas estadounidenses de largo alcance para atacar objetivos dentro de Rusia, a pesar de las garantías dadas a Washington y sus aliados occidentales de que no usaría armas de largo alcance para tales ataques.
El informe también señaló que Zelensky “expresó su preocupación” de que Kiev no tuviera armas de largo alcance capaces de alcanzar objetivos rusos en Rostov. Esas preocupaciones se expresaron durante una conversación entre Zelensky y el comandante en jefe ucraniano Valeriy Zaluzhny y otro funcionario desconocido.