En respuesta a una serie de tuits con las últimas revelaciones de los archivos de Twitter por Michael Shellenberger, el nuevo CEO de Twitter hizo algunas acusaciones sorprendentes. Elon Musk confirma que el gobierno pagó a Twitter millones de dólares para censurar información al público.

El mandato inicial del nuevo CEO de Twitter no ha carecido de controversia. En medio del drama que ha causado la reforma del servicio de suscripción de Twitter, los despidos masivos y las renuncias, tras un esfuerzo por adherir la plataforma a su visión, el último escándalo ha sido la revelación de los errores cometidos por el régimen anterior.

No hay subestimación de la división natural que causa el estilo de Elon Musk. El hombre más rico del mundo encabezó la adquisición de la plataforma de redes sociales por $44 mil millones y ahora está remodelándola. Al hacerlo, Musk no ha sido tímido para señalar dónde la plataforma ha fallado en el pasado.

Eso ha dado un nuevo giro hoy, ya que ha hablado abiertamente en respuesta al reciente hilo de "Twitter Files" de Michael Shellenberger. En esa respuesta, Elon Musk afirmó que el gobierno pagó a Twitter millones de dólares para censurar información al público.

La acusación es ciertamente alarmante y habla de los intentos de Musk de construir un nuevo tipo de Twitter más transparente. Además, de beneficiarse de separar el régimen pasado del liderazgo actual ​​y su visión para el futuro de la plataforma.

Musk ha sido un campeón innegable e implacable de la libertad de expresión. Sus decisiones surgen para asegurarse de que el sistema pasado y las acusaciones de censura de Twitter no estén presentes para él. Sin embargo, sus métodos han generado una opinión dividida sobre sus acciones.

Esta misma semana, una encuesta publicada en Twitter, por el mismo Musk, preguntó a los usuarios si querían que renunciara. Posteriormente, tras sus declaraciones de que cumpliría con los resultados, la encuesta terminó con una mayoría estando a favor de su renuncia. Este tipo de resultados hablan de la gran división de opiniones.

Queda por ver si estas acusaciones sobre el pasado régimen de Twitter son ciertas o no. Sin embargo, reflejan las acusaciones comunes contra la plataforma en el pasado.