Por: Antonio Moreno Ruíz
No conozco más tierra, que la tierra americana, lo cual ya es bastante.
Vi la luz en el Nuevo Mundo, y acá habré de morir, o ello supongo, Dios mediante.
La vida es dura y difícil, pero yo hago de mi capa un sayo, y sigo adelante.
Con lo poco que tengo me defiendo, y sobrevivo que no es poco. Que mis cueras y mi adarga me guarden.
Acá todo cobra otra dimensión. ¡Qué inmensa y compleja es esta tierra, que llevo por delante!
¡Sea lo que Dios quiera! y que la tierra americana, mis huesos resguarde.