La Vice-Presidenta fue también sentenciada a 6 años de prisión y está vetada de por vida, a no ostentar cargos públicos.
Un tribunal argentino condenó el martes a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner a seis años de prisión y la inhabilitó para ejercer cargos públicos en un caso de corrupción de alto perfil. En una sentencia transmitida en vivo, los jueces del Juzgado Federal 2 de la ciudad de Buenos Aires declararon culpable a Fernández de Kirchner como la "autora penalmente responsable del delito de administración fraudulenta en perjuicio de la administración pública". El tribunal la absolvió de otro cargo de "asociación ilícita". Los fiscales habían alegado que los contratos de obras públicas fueron entregados al magnate de la construcción y aliado Lázaro Báez, quien devolvió el dinero a Fernández de Kirchner y al difunto esposo Néstor Kirchner, también expresidente. Defensores de la vicepresidenta sostienen que es víctima de persecución judicial. La poderosa vicepresidenta, que tiene inmunidad temporal debido a su cargo actual, no enfrentará una pena de prisión inmediata y se espera que apele la sentencia, y es probable que el caso pase años en los tribunales superiores. Técnicamente, podría postularse para el cargo mientras las apelaciones están pendientes, pero dijo el martes que "no sería candidata para nada" en las elecciones generales del próximo año.