Por: Antonio Moreno Ruíz
La hispanidad debe ser defendida y reivindicada como una gran hermandad de pueblos que debe reafirmarse en los tiempos de la globalización. Porque una cosa es la globalización y otra el globalismo, y el globalismo supone la negación de los pueblos.
Ni por asomo renegamos de la conquista, pero puntualizamos la conquista fue un proceso relativamente corto, luego vino la pacificación y la integración en virreinatos, esto es, reinos de nuestra propia corona.
De hecho, la conquista no fue sólo de españoles europeos, sino que también fueron conquistadores los indios y los negros.
Fueron conquistadores los tlaxcaltecas que ayudaron a Hernán Cortés a derrotar a los aztecas y que después también ayudarían a conquistar las Filipinas.
Y con los tlaxcaltecas también iban zapotecas, tarascos, otomíes…
Fueron conquistadores los huancas, chachapoyas o cañaris que se aliaron con Pizarro, con quien también iba el conquistador mulato Miguel Ruiz, como conquistador de México fue el negro Juan Garrido y conquistador de Chile fue el negro Juan Valiente.
En la época de la globalización, la hispanidad debe acudir a su historia para reafirmar su identidad como hermandad, para que esto nos ayude a reconquistar nuestra libertad e identidad.
Nuestra historia debe ser entendida y defendida como un patrimonio conjunto.
España es Europa en América y América en España.
Por supuesto que España llevó muchas cosas al Nuevo Mundo, pero no olvidemos que sin papas no tendríamos tortilla, que sin tomate el gazpacho no está completo y que sin las continuas idas y vueltas, el flamenco no hubiera cristalizado.
Así es la gran fusión cultural que nos adorna y es algo tangible, real como la vida misma.
Y además, Sevilla fue conocida como el puerto y la puerta de las Indias.
Sevilla fue la capital económica y cultural del mundo hispánico y debe recuperar esa conciencia, que ahora quieren terminar de enterrar llevándose los estudios hispanoamericanos.
Al “Plus Ultra”, que significa “mucho más allá”, se le añadió el “Utraque unum” en el siglo XVIII, que significa “ambos son uno”.
Ese es el espíritu que debemos recuperar a orillas del Guadalquivir como antesala del Atlántico que fue Mare Nostrum.
El 12 de octubre, día de la hispanidad; un día para celebrar y compartir. Tengámoslo siempre presente.
*Imagen extraída de https://www.facebook.com/photo.php?fbid=515422227258111&set=pb.100063710132250.-2207520000.&type=3
Articulo Original: